Hablemos sobre cáncer bucal
¿Qué es el cáncer de boca? ¿Cómo se ve? ¿Cómo se detecta?. Compartimos un artículo muy interesante de salud, brindado por el Círculo Odontológico de Santa Fe.
Puede que usted, alguna vez, se haya formulado estas preguntas. Quizás ocurra que un familiar, amigo o compañero de trabajo comente acerca de alguien que padece la enfermedad. O tal vez nunca haya escuchado hablar sobre el tema.
Cierto es que se trata de una enfermedad importante. Pero también es relevante saber que los diagnósticos tempranos permiten, a muchísima gente, vivir con plenitud y totalmente curada.
La boca es fácilmente visible: usted puede mirarla ante el espejo. Y es el odontólogo quien, además de tratar los dientes, observa los labios, la lengua, el paladar, las mejillas, etc. Por eso es que, a diferencia de otros órganos que no están a la vista, la boca permite descubrir precozmente una lesión. Un control semestral con el profesional de su confianza no sólo sirve para cuidar sus dientes, sino que es necesario para revisar la mucosa bucal, examen que es muy breve e indoloro. Especialmente, los mayores de 40 años y los fumadores deben practicar ese chequeo periódico. Lo mismo que quienes tienen hábitos como el consumo de alcohol en exceso.
¿Cuál puede ser el resultado de la consulta?
– Que no tenga ninguna lesión: en este caso, repetirá la visita en el plazo convenido.
– Que tenga lesiones que puedan transformarse a largo plazo: perfectamente controladas, no constituyen riesgo alguno.
– Que tenga lesión temporal: seguramente, si se han realizado los controles periódicos, esa lesión sea pequeña, el diagnóstico precoz y el tratamiento totalmente exitoso.
Tenga en cuenta estos signos:
– Manchas blancas que no se desprendan al pasar una gasa en lengua, mejillas, labios, paladar, etc.
– Sensación de adormecimiento en algún lugar de la boca.
– Movilidad o pérdida espontánea de algún diente, sin causa justificada.
– Agrandamiento localizado en algún lugar de la boca.
– Heridas que no cicatrizan en 15 días (aunque no presenten dolor)
– Cambios progresivos en la forma de los labios, lengua o mejillas.
– Ganglios en el cuello de aparición brusca o de varias semanas (aunque no molesten).
– Desadaptación de prótesis sin causa aparente.
La existencia de cualquiera de estas señales no significa que inevitablemente exista un cáncer, pero alerta al profesional para prevenirlo: promovamos la detección temprana.
Fuente: Círculo Odontológico Santafesino
